Philadelphia Cheese Cake (u otra marca) es una de las más simples de todas las otras que existen. A diferencia una receta con queso fresco, el pastel de queso de Filadelfia le da a la masa una textura cremosa y un toque de acidez que lo hace muy especial.
Así que hoy te ofrecemos la receta de este pastel, un receta que también puedes seguir y realizar sin equilibrio. Pongamos la mano en la masa
Para la preparación:
Para la masa rota:
Primero, prepare la masa y, mientras al horno, podemos hacer la masa de la torta
1. Prepara el molde en el que harás la torta. Engrase con mantequilla y harina para evitar que la masa se pegue.
2. Caliente un vaso y medio de leche y viértalo en una ensaladera. Divida las galletas en leche y déjelas reposar durante unos minutos.
3. Cuando la masa esté completamente homogénea, viértala en el fondo del molde
4. Poner en el horno durante 8 minutos a 150 °
Ahora vamos a la preparación de la pasta de queso
1. En una ensaladera grande, bate un huevo. Agregue la mantequilla derretida y el azúcar. Batir hasta que quede suave.
2. Agregue el queso Philadelphia, la harina y el vaso de leche. Cuando la masa se espese, use una batidora eléctrica para asegurarse de que no haya grumos.
3. Vierta la mezcla en el molde en la masa corta y hornee durante 30 minutos a 170 °.
4. Con la punta de un cuchillo, verifique que la masa esté cocida. Si la punta del cuchillo sale limpia, la torta está lista. De lo contrario, continúe cocinando durante 10 minutos mientras baja la temperatura o con el horno apagado.
5. Cuando el pastel esté listo, déjalo enfriar y cúbrelo con mermelada de arándano o frambuesa.
Si consumes sandía de estas formas diferentes, cuidarás de tu peso, tus músculos y tu cuerpo
Aunque generalmente lo comemos como postre, lo cierto es que al combinarlo con los ingredientes correctos puede se parte de un plato principal muy nutritivo y una bebida revitalizante La sandía es mucho más que una fruta refrescante que tanto te gusta en cualquier momento del día. Mucha gente lo considera como un alimento a medio camino entre la fruta y la verdura.
La mayoría de los centenarios duerme 10 horas por noche. De hecho, el sueño profundo es fundamental para tener un cerebro sano. La ciencia aún no ha descubierto el secreto de la inmortalidad, pero no sabemos si nos gustaría aprovechar este privilegio . Sin duda, lo más importante es tener una gran calidad de vida, lo que nos permite vivir muchos años en plena salud, en equilibrio y felicidad.